Translation: Construyendo Un Destino
Words: Todd Fredrick
Hace muchos años, Walt Disney se dispuso a crear un destino para los fans de sus estudios. Esta sería una tarea interesante ya que el mercado meta incluía gente de todas las edades y llegaba a casi todas las esquinas del mundo. El necesitaría construir un destino que ofreciera algo para todos, y su sueño se hizo realidad en 1955 con la gran apertura de Disneyland.
Desde entonces, lo que ha sucedido con el destino de ensueño de Disney ha sido asombroso. Los visitantes llegan en cifras record, contribuyendo a impresionantes ganancias nunca antes vistas por la industria de los parques de entretenimiento y que otros luchan por replicar hoy en día.
Al aplicar la filosofía y estrategias de Walt Disney, nosotros también podemos transformar nuestras empresas en un destino buscado por clientes potenciales, y aún más importante, por empleados.
En la industria de la tecnología, muchos candidatos harían cualquier cosa por trabajar par Google, Amazon o alguna de los tan reconocidos “Mejores lugares para trabajar”. Sin embargo, en la industria de la construcción, esta tendencia ha sido todo menos ignorada y los empleados de calidad quieren trabajar en una organización bien dirigida y organizada.
Esto no es sorpresa para muchos contratistas súper exitosos. Ellos saben lo difícil que es cuidar a los empleados, y esa es la razón de su prosperidad. Muchas pequeñas y medianas empresas dicen cuidar a sus empleados, pero sin una estructura en sitio, la implementación es demasiado lenta y aquel buen empleado tiene una nueva oferta de trabajo antes de que se presente la oportunidad de cuidar de ellos.
Hacer de su empresa un destino para buenos empleados toma tiempo. Tendrá que sacar a las malas manzanas, mantener muchos líderes de medio nivel y poner esfuerzo en desarrollar un plan de empleo que acoja el crecimiento desde adentro, todo esto mientras se mantiene una estructura que los buenos empleados entiendan. La parte más importante del sistema puede ser forzarse a uno mismo a vivir en el. Desarrollar los sistemas de una empresa solo funciona cuando los dueños y ejecutivos ponen el ejemplo, y el buen liderazgo es lo que establece la reputación de una empresa como un empleador de calidad.
Entonces, ¿qué ingredientes componen un plan de empleo sólido? Nosotros jugamos con muchos a lo largo de los años, pero estos son algunos de los que encontramos mas beneficiosos.
- Reparto de utilidades: No un bono arbitrario al final del año, sino un set de metas de proyectos claramente definidas con comisiones pagadas tan pronto como se reciba el pago final por parte del dueño. Esto toma algo de planeación y ejecución, pero no tiene que ser tan elaborado que necesite de un contador y un MBA para descifrarlo. Necesita ser fácil de entender por los empleados.
- Programa de Recomendación de Empleados: Antes de anunciar contrataciones, simplemente deberíamos preguntar a los mejores empleados si pudieran recomendar a alguien para trabajar con nuestra empresa, recompensando a nuestro empleado con un simple bono de $100 si recomiendan a alguien que dure seis meses. Hay que recordar que –un buen empleado no quiere trabajar con uno malo. Las probabilidades de que recomienden a alguien como ellos son altas. Enfrentémoslo, todos nos relacionamos y tendemos a ser amigos con personas que comparten intereses y hábitos de trabajo similares.
- Comunicación y el arte de mostrar interés: Este debería ser el número uno, pero estudios han demostrado que lo último que leemos es con lo que más nos quedamos. Hay que comunicarse constantemente con los empleados. Preguntarles cosas y realmente mostrar interés sobre cuales son sus metas y aspiraciones. Cuando alguien, como dueño, es percibido de manera positiva, el empleado se vuelve más leal y enfocado en hacer el mejor trabajo posible. Construir relaciones con un empleado es tan importante como lo es con el cliente.
Si en verdad se quiere atraer y mantener empleados de calidad, hay que darles una razón para que lo busquen. Haga su empresa un destino que respete, recompense y se interese por sus empleados. Observe su reputación como empleador crecer y su próxima contratación puede ser la mejor.